Cuando todo era fácil (2017) de Nando López
Cuando una novela habla de nosotros, no importa quiénes, cuando nos habla del alma humana, no importa qué experiencias, estamos ante una novela universal, ante una gran novela.
Óscar es un fotógrafo que, a sus casi cuarenta años, tiene una carrera profesional que no termina de despuntar. Decide abandonar Nueva York, dar tiempo a la deteriorada relación con su chico, y regresar a su tierra. Espera reencontrar a los amigos de su juventud y hallar su identidad en un momento confuso de su vida. El resultado será un choque con la realidad, una reflexión sobre la vida. Tras celebrar una fiesta íntima de bienvenida aparece, cerca del lugar, una niña asesinada. Uno de los amigos será sospechoso.
Es un libro con tal riqueza de ideas que es difícil resumir los motivos por los que me ha apasionado. Destacaría esa profunda mirada sobre la amistad y el amor, los ideales y la realidad, el futuro y el camino ya hecho. Una mirada del adulto hacia el joven que fue, hacia esa vida llena de proyectos, de amistades inquebrantables; una mirada que nos obliga a reajustar las ideas del pasado y a seguir afrontando el futuro desde una realidad diferente.
El adulto que ha llegado a ese período de la vida, la madurez, sin darse cuenta y sin encontrar ese futuro prometedor que, desde la invencible fuerza de la juventud, se planteaba como alcanzable. Una búsqueda de la esencia de los valores que importan, unas nuevas ilusiones que nos sustenten en el camino para seguir.
Hay un momento, incluso en algunos una etapa entera, en el que todos volvemos la vista a nuestro pasado y reflexionamos sobre la vida de hoy y lo que queda por delante.
La novela también nos habla de las complejas relaciones con la familia, de las dificultades para mantener los sentimientos que teníamos hacia ellos o creíamos tener, de la diferencia generacional.
Otros muchos aspectos de las relaciones humanas se desarrollan en el libro: la fragilidad de los vínculos con las personas que queremos, la confianza, la sinceridad, la seguridad en uno mismo y en los demás, la monotonía de la convivencia...
Por otra parte, estos personajes (muchos de nosotros) han vivido la sociedad de libertad desenfrenada de los ochenta y los tiempos más recientes de una sociedad en crisis con corrupción, deshumanización social, el relativismo moral, el arribismo social para obtener más dinero o éxito. En definitiva, la transformación que se ha producido en las últimas décadas y que todavía sigue afectándonos.
Nando López escribe un texto lleno de belleza, filosofía y humanidad. Se adivina que hay muchas cosas en esta novela cercanas al autor y, al mismo tiempo, consigue que nos toquen.
He subrayado mucho durante su lectura y solo voy a recordar algunas de las frases, algunos de los temas que me gustaría destacar por la manera de expresarlos el escritor:
El tiempo "nos concede la ciencia de lo conocido a cambio de doblegar nuestra rebeldía"
"lo que perdemos con la madurez no es la ingenuidad, sino la inconsciencia"
El arte "tan filantrópico en sus fines, es esencialmente misántropo en sus métodos: no se puede interpretar la vida sin antes abrazar la soledad"
Los secretos "alguien, justo cuando empezamos a aprender a hablar, tendría que enseñarnos a aprender a callar"
El resentimiento "El rencor no es para quien sí triunfa -a ellos les reservamos la envidia, los celos y hasta la admiración más servil- , sino para quien comparte nuestra mediocridad, porque no es fácil digerir el espejo cotidiano en el que vemos, día tras día, nuestro propio fracaso"
La muerte "hablamos de los muertos creyendo que así los mantenemos vivos cuando solo subrayamos su ausencia"
"dejamos de ser cuando nuestro cuerpo nos abandona, cuando la enfermedad arrasa con todo y se hace fuerte en el lugar que antes sí era nuestro"
Si alguien te recuerda... "Nos volveremos carne de relato y seremos narrados por quienes no sabrán de nuestras causas, de nuestros motivos ni, mucho menos, de nuestros sentimientos. Nos resumirán en esquema y acción, argumento trivial de una vida que siempre se esforzó por encontrar su sentido y que, sin embargo, lo perderá cuando caiga en boca de otros"
"la verdadera literatura no es la que transgrede su tiempo, sino la que consigue trascenderlo"
Cuando todo era fácil se devora, se disfruta y nos hace reflexionar sobre el camino de la vida. Es la gran novela de Fernando J. López, supone su definitiva madurez en la narrativa, punto que ya había alcanzado en alguno de sus textos teatrales. Más allá de los grandes temas que ha defendido el autor en otros textos y en su actitud social activa, ha conseguido con este libro una obra profunda e imperecedera.
Editorial: Tres hermanas
Páginas: 267