Ensayo
4 personajes y 4 monólogos. Con una mínima excusa argumental de infidelidad y problemas de relación laboral y personal, asistimos a discursos cargados de ideas, que recuerda a un ensayo escrito.
Dos parejas de amigos se juntan en una sala para ensayar una obra. La relación entre ellos se encuentra en un momento tenso, una de ellas se acuesta con los dos hombres. Son cuatro monólogos, primero ellas hablan durante media hora cada una y, tras interludio musical, hablan ellos. Durante los discursos, el resto de los compañeros reaccionan, con gestos, movimientos y alguna onomatopeya, pero sin hablar. Hacia el final de la obra se exige del espectador joven, rompiendo la cuarta pared, que reaccione ante la historia (toque social).
No estamos ante una obra realista. El contenido de los discursos está lleno de reflexiones y pensamientos de tendencia filosófica.
El primer discurso o monólogo es el más acelerado, la verborrea te invade, se acumulan frases que no puedes asimilar, ¿profundas siempre? Se produce ese tipo de situación en la que hay una impresión general de que están contando cosas trascendentales, pero esta forma de contarlo impide que lo analices. Quizá por ello atrapa a los espectadores: he visto algo profundo de verdad aunque no soy capaz de decir qué. Los siguientes monólogos permiten ver mejor los árboles filosóficos tras el oscuro bosque. Reconozco que hay bastantes ideas buenas, sobre el amor y la ausencia de límites, sobre el pudor y los convencionalismos, el vacío de ideologías de la sociedad actual, sobre el teatro.
No me ha gustado la repetición, la estructura de la obra en forma de ensayo sin dramaturgia, el exceso en muchos aspectos (actuación, texto). Pascal Rambert repite dinámica de "La clausura del amor".
María Morales e Israel Elejalde dan una lección de interpretación, muy difícil de llevar por las características del texto y la dramaturgia. Jesús Noguero tiene el discurso menos enérgico, menos expresivo. Fernanda Orazi, desde mi punto de vista, no ha podido con un imposible papel: tono subido desde el inicio, histérico, gritón y verborrea acelerada que impiden cualquier matiz en la declamación.
Una obra no realista con una estructura y una dinámica que no comparto. Hay otros ejercicios intelectuales más interesantes.
Texto, dirección y escenografía: Pascal Rambert
Versión: Coto Adánez
Actores: Israel Elejalde, María Morales, Jesús Noguero, Fernanda Orazi
Ayudante de dirección: Fernando Sánchez-Cabezudo
Vestuario: Sandra Espinosa
Producción: Buxman Producciones
Teatro: Pavón Teatro Kamikaze
12 de septiembre a 8 de octubre de 2017
Duración: 115 minutos