Dos familias

"Dos familias" es una obra sencilla pero muy interesante que aborda la adopción desde el conflicto que genera el retorno del niño al padre biológico. Los actores brillan en este pequeño gran drama.

Una pareja que no puede tener niños adopta a un recién nacido y, dos años después, tienen que devolver el niño al padre biológico que se ha rehabilitado de su drogodependencia (la madre murió por sobredosis). Al adoptarlo ya sabían que podía ser por sólo un tiempo pero, a estas alturas, parecía que era definitivo.

La obra empieza con el asistente social (fuera de escena) comunicando a cada una de las partes que, en veinticuatro horas, el niño va a cambiar de manos: somos testigos de cómo reaccionan cada uno de ellos. En la siguiente escena los padres recogen el equipaje del niño, discuten entre ellos... Al final se producirá el encuentro de los tres en la sala de espera del asistente social: la situación incómoda, la tensión, el conflicto y también la comprensión...

Es una dramática historia en la que afloran sentimientos enfrentados, casi siempre contenidos, sin cargar las tintas a pesar de la situación extrema que viven estos personajes. En varias ocasiones, sobre el escenario se representan los dos espacios (padre biológico / padres adoptivos) de forma simultánea y permite un juego de diálogos entrecruzados en los que se manifiestan sentimientos similares o contrapuestos en espacios diferentes pero en el mismo tiempo.

El tema es apasionante, humano, realista y genera un debate interno en los espectadores sobre cómo reaccionaríamos ante esta misma situación, un conflicto difícil de resolver para todas las partes implicadas. Aquí se ha suprimido en la ecuación al niño por ser muy pequeño y no ser consciente del cambio.

"Dos familias" también nos habla de la dificultad de mantener la ecuanimidad cuando un problema nos afecta de forma tan íntima y de los sentimientos que afloran y nos hacen reaccionar de forma inesperada.

La interpretación de los tres actores consigue que nos acerquemos emocionalmente a esos personajes. Jon Galera empieza en un tono algo subido al representar su reacción hiperreactiva (lógica, por otra parte) ante la noticia del retorno del hijo, pero enseguida nos atrapa en la piel de ese joven superado por la situación pero ilusionado ante la inesperada perspectiva. Lluïsa Valldura nos acerca a la mujer que sufre por dentro pero es fuerte, sus gestos y miradas contenidas tienen gran fuerza expresiva. Esteban Balbi, con su acento argentino, nos encandila con su personaje cercano, con una magnífica interpretación.

La dirección de Luis De Sannta es adecuada pero le falta esa energía que consigue que el texto vuele alto, hay buen oficio pero nada más. La escenografía es pobre pero ajustada a las necesidades de la representación.

El texto de José Pascual Abellán nos ofrece unos diálogos veraces y un argumento humano y social muy interesante; sabe evitar el peligro del dramatismo excesivo, ajustándose al drama más cotidiano, a los diálogos naturales. La obra precisaría un poco más de cuerpo, los personajes están poco dibujados y pierde fuerza. El motor del texto es el conflicto creado y todo gira en torno a él, no afronta otras particularidades que podrían enriquecer la obra: de los personajes sólo conocemos que los padres adoptivos son de clase media alta y que quieren al niño, del padre biológico que fue drogadicto y tiene una madre con la que ha perdido contacto, poco más.

"Dos familias" obra honesta, interesante que nos hace vivir una situación que nos lleva a reflexionar... no está mal ¿no?

Texto: José Pascual Abellán

Intérpretes: Esteban Balbi , Jon Galera , Lluïsa Valldura

Dirección y Escenografía: Luis De Sannta

Vestuario: Lluïsa Valldura

Teatro: Sala Nueve Norte Del 18 de septiembre al 30 de octubre de 2022

Duración: 70 minutos